A lo largo de más de un siglo de historia, los sistemas de reproducción y escucha de la música fueron cambiando constantemente debido a los descubrimientos científicos y al incesante desarrollo de la tecnología del sonido y la grabación.
En el extremo del mundo, particularmente en Aysén, la obsolescencia de tales sistemas era más lenta, de modo que en los hogares de la Región coexistieron gramófonos a cuerda, radios a pilas y eléctricas, y tocadiscos de mueble y portátiles. Estos dispositivos jugaron un papel esencial en el poblamiento del territorio y en la generación de una identidad regional, impacto que se aprecia en la colección que atesora el Museo Regional de Aysén.
Gramófonos y tocadiscos
Gramófonos de bocina, de maleta o tipo cámara -aparatos que no contaban con componentes eléctricos y tenían pocos elementos mecánicos que mantener- acompañaron al aysenino en su casa y en sus recorridos durante buena parte del siglo XX. Incluso antes de que llegara la electricidad a Aysén, estos dispositivos le permitieron acceder a un amplio repertorio musical grabado por profesionales de distintas latitudes.
El Museo Regional de Aysén conserva ejemplares de estos tres tipos de gramófonos, que obedecen a la cadena de la reproducción mecánica del sonido. De estos, el más recordado en el país es el gramófono con maleta: la famosa vitrola.
Las innovaciones tecnológicas en la década de 1940 trajeron al escenario local un atractivo invento eléctrico: el tocadiscos. A partir de los años cincuenta, este integró habitualmente una radio, uniendo en un solo mueble los dos inventos que habían revolucionado la forma de difundir y escuchar música en el siglo XX. El Museo custodia desde elegantes radio-tocadiscos de mueble fabricados en Alemania hasta funcionales radio-tocadiscos portátiles de manufactura argentina.
Radios para todos los gustos
Dada la escasez de electricidad en la Región y el gran tamaño de las baterías que las radios requerían, el acceso de los habitantes de Aysén a estos aparatos fue difícil. Aun así, los radiorreceptores lograron entrar a las salas de estar y luego se instalaron también en los dormitorios y las cocinas, hecho que daría a hijos, dueñas de casa y trabajadoras del hogar mayor autonomía respecto al uso de este dispositivo, ampliando de ese modo su rango de influencia. Esto fue posible a partir de la aparición de radios de sobremesa como las fabricadas por RCA Victor en Chile durante los años cuarenta, de las cuales el Museo cuenta con un ejemplar.
Junto con las radios de mueble y de sobremesa, los fabricantes comercializaron un modelo de radio portable -primero a tubos y, luego, a transistores- que disminuyó considerablemente el tamaño de los receptores. Fue a partir de esta reducción, en efecto, que se empezó a hablar de radios portátiles en Chile. En los años sesenta, se comercializaban dos tipos de estas radios: aquellas con forma de lonchera y las llamadas radios de «bolsillo de camisa». El Museo conserva ejemplares de ambos tipos.
Dado que Aysén comenzó a poblarse de chilenos en el siglo XX, los vertiginosos avances tecnológicos de esta época, en particular aquellos relativos a los aparatos de recepción y reproducción sonora, ejercieron una influencia significativa en el poblamiento del territorio y en la cultura regional. Es precisamente por ello que esta colección constituye una fuente documental de incalculable valor patrimonial.
Descarga el artículo completo "Música, tecnología y territorio en el Museo Regional de Aysén", por Juan Pablo González