Nidos fósiles de escarabajos
Fotografía: Enrique Bostelmann
No todos los fósiles constituyen restos de animales o plantas extintas. Existen algunos denominados icnofósiles, que reflejan el comportamiento de los organismos, como huellas, marcas de raíces, galerías, nidos, etc.
El objeto de colección de este mes comprende icnofósiles de nidos de escarabajos peloteros procedentes de Alto Río Cisnes, con una edad cercana a los 14,9 millones de años.
Los escarabajos peloteros alimentan a sus larvas con excrementos de grandes mamíferos herbívoros. Para ello seleccionan porciones de estiércol que apelotonan con sus patas, dándoles forma esférica. Luego esta bola es transportada y enterrada en una galería subterránea.
El nido se compone de la cámara de provisiones rellena de estiércol (bola) y una pared externa que la protege. Cuando la larva finaliza su desarrollo, eclosiona dejando un característico oricio de salida.
Los ejemplares expuestos corresponden al primer registro de nidos fósiles de insectos realizado en Chile. Actualmente la Región de Aysén concentra la mayor diversidad de este tipo de icnofósiles, incluyendo celdas de abejas solitarias, cámaras de pupación de polillones y chicharras, nidos de escarabajos coprófagos y necrófagos.