El teredo (ej.: Teredo navalis) en un extraño molusco marino, capaz de taladrar maderos y troncos que se encuentran en el mar. Cientos o miles de estos animales pueden atacar al mismo tiempo, causando estragos, como sucedió por ejemplo durante la época de conquista, donde estos temibles animales devoradores causaron numerosos naufragios.

Su acción devoradora se puede evidenciar incluso en la actualidad, como sucedió recientemente en Chiloé, comuna de Ancud, con el derrumbe del puente Caipulli en marzo de este año.

Los teredos evolucionaron hace millones de años, desde formas parecidas a una "almeja", hasta adquirir su singular aspecto de gusano. En su intestino co-evolucionaron bacterias capaces de digerir la celulosa y la lignina. Sus valvas (conchas), muy reducidas en tamaño, le ayudan a perforar túneles en la madera, los cuales revisten con un tubo calcáreo.

Una vez que los teredos han consumido prácticamente todo el tronco, lo abandonan. Los túneles son posteriormente reutilizados por pequeños crustáceos, poliquetos (verdaderos gusanos marinos) y algas, entre otros.

En la Región de Aysén (Península de Taitao) se hallaron recientemente los fósiles de estos animales con una edad cercana a los 20 millones de años. Se trata de troncos con restos de tubos calcáreos que hoy se encuentran en el Museo Regional de Aysén y que continúan siendo investigados, ya que en la actualidad estos animales continúan consumiendo troncos y otros restos de madera en todo el litoral aisenino. El desafío ahora, es determinar de qué especie de teredo se trata.

CURADURIA: Leonardo Pérez Barría y Juan Pablo Varela Cartagena

CONSERVACION: Juan Pablo Varela Cartagena

EDICION: Ángela Morales Márquez

AGRADECIMIENTOS: Teredolites isp., fue recolectado por Leonardo Pérez durante febrero 2017 en marco del Proyecto Fondecyt 1150664 "Miocene diversity along the coast of central to southern Chile across multiple taxa" del Dr. Sven Nielsen (UACh). El tronco actual con perforaciones y tubos de teredo, fue recolectado por Leonardo Pérez en mayo 2019 durante la ejecución del Proyecto CONICYT Ciencia-Empresa "Desde el lago General Carrera al Golfo de Penas: El trazo de una nueva Geografía en Aysén para el Turismo y la Ciencia" del Dr. Gabriel Inostroza (UACh), en colaboración con el Museo Regional de Aysén.